El pasado fin de semana tuvimos la oportunidad de practicar rapel con los amigos de Meka Outdoor en San Pedro Tlanixco, Tenango, México, al ser ganadores de uno de los premios, que dieron como parte de su celebración del segundo aniversario.
La cita fue a las 8 am en sus oficinas ubicadas sobre Paseo Colón, Toluca, de donde partimos hacia el punto señalado.
Después de cruzar el pueblo de Tlanixco, llegamos a una zona arbolada que desciende del Nevado de Toluca, donde dejamos el vehículo y nos pusimos el equipo, pues iniciamos la caminata.
Unos metros más adelante al internarnos en la zona boscosa, pasamos sobre un puente que pasa sobre un cañón angosto, pero profundo, con sus paredes llenas de musgo, pues ahora que es temporada de lluvias, todo se ha reverdecido.
Muchas veces he pasado por esta zona, pero nunca me imaginé que a pocos metros se encuentren paisajes tan espectaculares como este.
Luego de subir un poco por veredas por donde se ven bajara las personas con sus animales cargadas de habas, leña, maderos y pulque para la venta, llegamos a un pequeño cañón de unos 4 mts de altura, sin agua a pesar de la época, por donde comenzamos a caminar entre paredes verdes por el musgo.
Salimos a un cañón muy grande, pues el pequeño por donde caminamos conduce a un espacio abierto con una caída de aproximadamente 100 mts. A lo lejos, se observa una caída de agua de aproximadamente 60 mts que se ubicaba por debajo del punto del cual realizamos el descenso.
Ismael, Ulises y Sandra (Meka Outdoor) nos dieron la explicación de la forma en que realizaríamos el descenso, así como las medidas de seguridad con las que debíamos realizar el rapel y las que tomaría el equipo.
Caída de agua, vista desde donde descendimos
De repente soplaba un viento fuerte y frío, que se sumaba a los nervios normales por iniciar la actividad, hasta que por fin nos tocó el turno para bajar. Como es una caída de agua, las piedras y paredes por las que bajamos son muy lisas y resbalosas, y donde hay puntos de apoyo se acumula arena, lo que incrementa la inestabilidad.
Bajamos 60 mts. aproximadamente, para hacer un cambio en la cuerda y continuar hasta el fondo del cañón.
Ya abajo y después de que descendió todo el equipo, nos dirigimos hacia la caída de agua sonde tomamos fotos, nos refrescamos e iniciamos una caminata por el fondo del cañón, siguiendo el trayecto del río, pasmos por zonas boscosas, cubiertas de vegetación donde las bromas sobre "gorilas en la niebla" no se hicieron esperar.
Finalmente iniciamos el ascenso por la ladera del cañón, a través de paredes muy inclinadas, tomando varios descansos para finalmente llegar a la cima nuevamente, en una costilla prácticamente, pues a ambos lados corre el cañón.
Ha sido una experiencia muy agradable que disfruté con mi hijo, altamente recomendable para quienes gustan de este tipo de actividades y con toda la confianza y profesionalismo de Meka Outdoor.
Destacamos también la generosidad de esta empresa, pues en ocasiones las promociones o festejos de este tipo, implican la compra de otros productos, cuestión que en este caso no sucedió.
Aquí los datos de Meka Outdoor:
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